Emocionante. Así fue el reencuentro de la gente con el Estadio Libertadores de América, que volvió a vestirse de rojo respetando el aforo y los protocolos dispuestos por las autoridades sanitarias.
Familias, parejas, amigos y compañeros de cancha se reecontraron con el lugar más lindo del mundo y no faltaron las risas y los llantos de emoción. Volvieron también los nervios y la ansiedad previos a cada partido y volvió el fútbol con hinchada.
Luego de los cantos, los papelitos y los homenajes empezó a rodar la pelota. El equipo dirigido por Julio César Falcioni recibía a un irregular Gimnasia de La Plata comandado por Pipo Gorosito.
Sin Insaurralde en la defensa por acumulación de amarillas, el DT salió a jugar con Sosa; Bustos, Barreto, Laso, Costa; L. Romero, Blanco; Velasco, Soñora, Martínez; S. Romero. Joaquín Laso pudo debutar en el LdA y con su público.
En líneas generales, el encuentro fue muy parejo, ya que al Rojo le costó mucho doblegar tácticamente al rival, que vino a resguardarse e intentar salir rápido con sus delanteros. Así llegó el primer gol, con un pase filtrado por Aleman y definición del veloz Carbonero.
Afortunadamente, al igual que ocurrió con Vélez, el Rey de Copas se recuperó de inmediato y segundos después, con una jugada colectiva perfectamente terminada entre Bustos y Romero, el capitán puso el 1 a 1. Y llegó el descanso.
El complemento fue muy parecido a la primera etapa. Los espacios escaseaban y, excepto un cabezazo de Barreto que fue salvado en la línea, no hubo muchas situaciones de peligro en ninguno de los arcos. La pelota fue siempre del local, pero costó generar profundidad en ataque.
Los ingresos de los juveniles Toto Pozzo, Saltita González y Chila Márquez no le dieron al equipo la frescura que necesitaba y no hubo tiempo para más.
La mala noticia fue que Domingo Blanco alcanzó las cinco amarillas y no estará ante Aldosivi, aunque podrá retornar Insaurralde. El próximo destino será Mar del Plata para visitar al Tiburón el domingo a las 18 hs.
¡A levantarse, Independiente!
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