Mientras esperan que Burdisso responda si acepta ser el manager, los dirigentes de Independiente tienen un técnico en la mira: Crespo. Quienes asuman se van a encontrar con un escenario muy complejo.
Crespo, quien tiene de reparador físico a Kohan, seduce a todos los miembros de la dirigencia.
FAVIO VERONA
Olé
No es un desafío para cualquiera. Y tampoco es un reto que todos estén dispuestos a aceptar. Independiente es un gigante que está de rodillas. Un club con un pasado glorioso y un presente que duele. El Rojo es, probablemente, una tentación para aquellos que son adictos a la adrenalina que genera enfrentarse a la adversidad.
La dirigencia ya está inmersa en la búsqueda de los reemplazantes para Jorge Burruchaga y Lucas Pusineri, quienes dejaron sus cargos durante el transcurso de la semana. En el club quieren contratar a un manager para que se haga cargo de la elección del técnico, aunque la realidad marca que ya hay nombres para ambos cargos. El secretario general del club, Héctor Maldonado, se reunió el miércoles con Nicolás Burdisso, quien ya desempeñó el rol de director deportivo en Boca en 2019. El ex defensor viajó a Grecia ya que también recibió una propuesta de una institución de ese país. Este viernes, los dirigentes de Independiente le enviaron un informe sobre la situación económica del club y Burdisso prometió que la semana que viene responderá si acepta la propuesta. En el Rojo imaginan que va a ser negativa y ya hay algunos planes alternativos: Daniel Montenegro, con quien se reunieron cinco veces antes de la llegada de Burruchaga, Nicolás Frutos, Bruno Marioni y Faryd Mondragón, quien se desempeña como director de relaciones internacionales del club.
A pesar de que la idea es que el entrenador sea escogido por el manager, en el club ya tienen un nombre apuntado: Hernán Crespo. Es el único que reúne consenso en la mesa chica de la Comisión Directiva. En diciembre de 2019 se habían reunido con él por intermedio de Alejandro Kohan, quien trabajó en el club en 2017, como preparador físico del cuerpo técnico de Ariel Holan. En ese momento el proyecto de Valdanito sedujo, pero finalmente optaron por traer a Pusineri ya que tenía más espaldas por su pasado en el club. Crespo no piensa sentarse a hablar hasta que Defensa finalice su participación en la Sudamericana. Su equipo disputará el martes la semifinal de ida ante Coquimbo y, si el Halcón llega a la final, la misma se disputará recién el 23. Luego del partido ante River, el plantel del Rojo tendrá vacaciones hasta el 18, cuando regresará a las prácticas. Si para ese momento no está definido el técnico, al equipo lo dirigirá Fernando Berón.
En Independiente saben que no será fácil buscar un manager y un entrenador. Quienes asuman se encontrarán con un panorama caótico. Tras la salida de Pusineri, el plantel quedó destruido desde el punto de vista anímico. La dirigencia está fragmentada. Y son varios los que darán un paso al costado porque están en desacuerdo con las formas de conducción de los Moyano. En los próximos días podrían renunciar el secretario deportivo, Jorge Damiani (ya pidió licencia), el vicepresidente 2°, Carlos Montaña, y los directivos Daniel Seoane y Damián Espósito. El aluvión de salidas podría ser aún mayor. Hugo Moyano y su hijo Pablo están ausentes en el día a día, algo que sufrió Pusineri, quien debió reunirse siempre con el secretario general Héctor Maldonado, la única autoridad presente que se encarga de todo el manejo institucional.
ar con el achique del presupuesto del plantel profesional. A los jugadores les deben parte del mes de octubre, noviembre, diciembre y el aguinaldo. Y ya existe cierto malestar. Pablo Hernández es un futbolista del que intentarán desprenderse. A Sebastián Palacios, quien debe volver tras haber estado a préstamo en Newell’s, ya le buscan destino porque su sueldo es alto. Y Alexander Barboza podría seguir su carrera en Bravos de Juárez.
El Rojo tiene un pasivo de $ 2.807.225.579. En el presupuesto, que se aprobó el 29 de diciembre, se contempla que el club debe vender por u$s 20.000.000 para empezar a equilibrar las finanzas. Alan Franco y Alan Velasco estarán en la vidriera. En diciembre habrá elecciones y el clima ya está caliente. Quienes lleguen se encontrarán con un Infierno.
"OLÉ"
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